-Antes pensaba que la gratitud era una respuesta espontánea a los dones recibidos, pero ahora veo que también puede vivirse como una disciplina.
"La disciplina de la gratitud es el esfuerzo explicito por reconocer que todo lo que SOY y TENGO se me ha sido dado como un don de AMOR, don que tengo que celebrar con alegría.
-El padre del hijo prodigo se entrega totalmente a la alegría que le da el que su hijo haya vuelto."Tengo que aprender a ""ROBAR""toda la alegría que haya disponible y hacérsela ver a los demás".
-Tiendo tanto a impresionarme por la tristeza innata a la condición humana que ya no reclamo la alegría que se manifiesta en formas, muy pequeñas, pero autenticas.LA RECOMPENSA DE ELEGIR LA ALEGRÍA ES LA PROPIA ALEGRÍA. Una vez que escoges elegir la alegría escondida en medio del sufrimiento, la vida se convierte en una fiesta. La alegría no niega la tristeza, si no que la transforma en una tierra fertil para cultivar mas alegría.
3 comentarios:
Qué bueno comapartir el hijo pródigo como un buenísimo libro. No dejes de leerle otras cosas a Nouwen.
Todavía no lo puedo terminar de leer, pero me falta poquito.....los comentarios serán en persona
salu2 al ogro
Rosario tienes razón... sin Dios el hombre es "sólo tristeza" y cuadro inacabado... que se termina antes incluso de ese último brochazo que... más lo perjudicarían... y menos... no acaba de estar "inacabado". Por eso hay tanta tristeza en lo que la gente escribe. No tienen final... no saben que Dios es su padre y que están "sólo de paso"... no miran en la valla donde Dios les espera a la puerta de salida del Colegio.
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